“That’s one small step for [a] man, one giant leap for mankind” (Es un pequeño paso para un hombre, un salto gigantezco para la humanidad); Hoy se cumplen 50 años de que Neil Armstrong dijera esta frase mientras tocaba la superficie de la Luna.
Una Aventura como ninguna.
En la historia de la humanidad hay multitud de eventos admirables e inspiradores, más ciertamente ninguna como las misiones Apolo, programa que es probablemente el que más participantes ha tenido en la historia (casi medio millón de personas trabajaron en este programa); haciéndolo un resultado que es realmente un esfuerzo común, único en nuestra civilización; alcanzando la realización de un sueño compartido por un gran número de persona; el sueño de poner al primer ser humano en la superficie de la Luna.
La presteza y duro trabajo de este gran número de personas es lo que permitió ir de una idea, a un resultado de esta magnitud en un tiempo tan corto. Del momento en que se estableció este compromiso, con el discurso del presidente Kennedy en Mayo de 1961; a la llegada del Módulo lunar Eagle a la superficie de la Luna transcurrieron solo ocho años; tiempo en el que se tuvieron que conceptualizar multiples elementos para esta mision, aparte del simple hecho de idear la mejor forma de hacerlo.

Buzz Aldrin descendiendo del Módulo lunar (nasa.org)
Los motores F1
Las historias son incontables, un ejemplo es el diseño del sistemas de propulsión, los motores F1, que en sus inicios tuvieron multitud de problemas, pues al ser tan grandes sufrian de inconsistencias en la mezcla de combustible y oxidante, provocando una combustión desigual que creaba fuertes vibraciones (el término usado era “Oscilacion rotatoria Tangencial”), que como resultado provocaba que estas oscilaciones terminaran por afectar la integridad estructural del motor provocando su falla; fallas que eran espectaculares, teniendo una explosión súbita del motor.
La ingeniería aeroespacial de la época era ás una combinación de ciencia y arte, pues no había forma de simular como actuaban los fluidos del combustible y oxidante. Así que intentaron una idea radical para controlar este problema; si la combustion era inestable, entoces decidieron crear una inestabilidad en demanda, haciendo uso de cargas explosivas en el mismo motor; con las que podrían controlar y de esta forma reestablecer el motor y controlar esta vibraciónes. En síntesis, combatir caos con un caos en demanda.Esta solución, mas el uso de un arreglo de deflectores, resolvió el problema de inestabilidad dinámica de los motores, haciéndolos 100% confiables, con 65 motores en 13 lanzamientos trabajando perfectamente.

Motores F1 (nasa.org)
Las computadoras de navegación
Al inicio de los años 60’s el estado del arte en computadoras aún estaba basado en mainframes, computadoras gigantescas que ocupaban múltiples habitaciones; así que la sola idea de pensar en una computadora “transportable” era descabellada. Mas esta era la necesidad en las misiones Apolo; y se necesitaban no una, sino cuatro computadoras, para fines de control de lanzamiento, navegación del módulo de comando y módulo lunar y una computadora extra de emergencia.
Estas deberían tener el tamaño no mayor al de un portafolio; y el módulo de control debía caber en un espacio de 30x30x30 cm; estas computadoras hicieron uso de los primeros circuitos integrados, dado que aún no había microprocesadores comerciales; así que el módulo de procesamiento también fue diseñado exclusivamente para este programa.
La computadora contaba con seis módulos de solo lectura (ROM), que formaban su código, con un total de 36 K-bytes; y con 2 K-bytes de RAM para el procesamiento de instrucciones. Esto era algo tan inusual que el contrato para fabricarla no tenía realmente especificaciones, más allá del peso y dimensiones; y alguna información sobre los elementos que se debían controlar. El código ROM fue fabricado manualmente, mediante el ensamblaje y conexión de seis módulos.
Para tener una referencia sobre la información que 36 K-bytes representan, actualmente un típico mensaje de correo electrónico usa alrededor de 75 K-bytes de memoria.
Otra peculiaridad de esta computadora era su capacidad para recuperarse después de una falla; manteniendo su estado y reestableciéndose para continuar con el mismo estado que tenía antes de esta eventualidad.

Computadora de misión Apolo (Wikipedia.org)
Los cohetes Saturno V
La misión que llegó a la luna fue el Apolo 11, pero esto no significa que hubo 10 misiones previas tripuladas. La primer misión Apolo con tripulación fue el Apolo 7. El apolo 8 fue la primera misión que visitó y orbitó la Luna, esta no contaba con el módulo lunar a bordo, pues este aún tenía muchas dificultades técnicas y por ello decidieron no llevarlo a bordo de esta misión. Fue hasta el Apolo 9 cuando el primer módulo lunar (Spider), fue probado; estando en órbita terrestre.
La misión Apolo 10 fue un “ensayo” previo al alunizaje, usando el Módulo lunar para viajar hasta 3 KM sobre la superficie lunar. Las misiones Apolo tripuladas iniciaron en Octubre 11-22 de 1968 con el Apolo 7, continuando con el Apolo 8 en Diciembre 21-27 de 1968, Apolo 9 en Marzo 3-13 de 1969 y Apolo 10 en Mayo 18-26, 1969. Acumulando un total de 6 misiones exitosas con Alunizajes.
La misión Apolo 17, fue la última misión de este programa, donde los astronautas mantuvieron una base en la superficie lunar por un total de tres días. Lo que creo podría considerarse la primer base extra planetaria.

Cohete Saturno V (nasa.org)
Mi perspectiva
Aún cuando no tuve la oportunidad de presenciar directamente estas misiones; estas siempre han sido una fuente de inspiración personal. Fue cuando tenía alrededor de 12 años cuando leí mi primer libro sobre las misiones lunares “El Apolo en la Luna”, donde describian en detalle loque los astronautas hacían en la luna, commentando sobre las herramientas que se utilizaban, los experimientos que instalaron, y los detalles de como resolver problemas simples, desde la creación de un color que fuese fácilmente distinguible (Anaranjado internacional), hasta la simple consideración de usa lápices para no tener problema con la ausencia de gravedad, pues los bolígrafos no funcionaban sin esta.
Multiples historias como esta dieron como resultado este gran logro; si te interesa conocer muchas mas historias sobre las misiones Apolo, te recomiendo el sitio “Hack the moon”, este tiene material invaluable sobre historias personales, elementos técnicos y las misiones en sí.

La Tierra ascendiendo, foto desde el Apolo 11 (nasa.org)
En estos cincuenta años, no tengo mas que reconocer el legado de las misiones Apolo, y espero poder presenciar las siguientes misiones a la Luna. Mucho éxito proyecto Artemisa!
Saludos
Alex, ScienceKindle.